La taza de café o té como pasaporte a un estado único: su tíntineo es una de las músicas más celestiales. Hace poco descubrí en Cahiers que en Deux ou trois choses que je sais d'elle, uno de esos experimentos de Jean-Luc Godard - que en estos días se ha convertido en octogenario-, hay una secuencia en la que vemos como el café removido puede formar un pequeño universo en movimiento. En sus espirales te puedes perder definitivamente...
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